Es un recurso que tiene como finalidad mejorar la calidad de vida de las personas mayores, sean dependientes o no, y de las personas que cuidan.
En los grupos, sus miembros comparten su situación con personas en situación similar, aprenden de otras experiencias, pueden expresar sus sentimientos y necesidades, el buen clima grupal les reconforta y consiguen en gran medida entender y aceptar su situación.