Ante el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer o demencia se inicia un
proceso largo, complejo y con numerosas preguntas necesarias para conocer y
comprender la enfermedad y donde las
características y recursos personales así como el soporte familiar y los apoyos del entorno son necesarios en este camino.

La situación de los núcleos
rurales dificulta este proceso y en numerosas ocasiones las personas cuidadoras no disponen de una red de apoyo
familiar o socio-sanitaria, de unas estrategias y
habilidades necesarias para entender y cuidar la enfermedad o de unos grupos de
apoyo con conocimientos específicos donde compartir dificultades, aprendizajes,
preocupaciones y transmitir sus emociones.